Este 24 de marzo de 2020 inició la Fase 1 del COVID-19 en México, con 367 casos confirmados por la Secretaría de Salud, de los cuales 292 eran hasta ese momento importados y 5 no tenían antecedentes identificables de importación.
Con ello, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) puso en operación el Plan DN-III-E, con lo cual se dispone de 16, 750 elementos de personal médico para atender a posibles enfermos del virus.
¿Pero en qué consiste el Plan DN-III-E?
El Plan DN-III-E es un operativo militar que establece los lineamientos generales a los organismos del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, para realizar actividades de auxilio a la población civil afectada por cualquier tipo de desastre: fenómenos geológicos, hidrometereológicos y/o químico tecnológicos.
Fue creado y aplicado por primera vez en 1966 ante el desbordamiento del Rio Pánuco que afectara a la población del sur de Tamaulipas y del norte de Veracruz, con resultados positivos, propiciando una recuperación rápida de la zona de desastre.
Se llama DN-III-E a raíz de su inclusión, en 1966, en la Planeación de Defensa Nacional, dentro del anexo E.
El Plan DN-III-E se basa en 5 puntos básicos o acciones generales:
– Búsqueda y rescate.
– Evacuación de comunidades.
– Administración de albergues.
– Recomendaciones a la población.
– Seguridad y vigilancia de áreas.
Y cuenta con 3 fases que rigen la participación del personal del ejército y fuerza área:
1) FASE DE PREVENCIÓN: simulacros para verificar la efectividad del equipo y el material disponible para reaccionar ante una emergencia, reconocimiento para verificar las vías de comunicación en caso de evacuaciones necesarias, actualización de mapas de riesgo, identificación de amenazas, comprobación del estado físico de albergues, centros de acopio y refugios temporales; enlace con Consejos de Protección Civil, etcétera.
2) FASE DE AUXILIO: alertamiento, planes de emergencia, coordinación, evaluación de daños, seguridad, búsqueda, salvamento y asistencia; servicios estratégicos y equipamiento, salud y aprovisionamiento.
3) FASE DE RECUPERACIÓN: rehabilitación de caminos, recuperación de servicios básicos de salud, agua y electricidad, etcétera.
De esta manera, ahora que ha entrado en marcha la fase preventiva del Plan DN-III-E ante la emergencia por el COVID-19 en nuestro país, las fuerzas armadas trabajan en la búsqueda de nuevo personal médico y de enfermería y en preparar las instalaciones hospitalarias de la SEDENA de forma que se utilicen para enfermos de COVID-19, además de hacer un censo de las instalaciones hospitalarias y medicamentos disponibles. Además, se contempla que la Secretaría de Marina pondrá a disposición algunas de sus instalaciones en puertos para casos graves, así como también centros de aislamiento voluntario.
En la siguiente fase, la de auxilio, las instalaciones médicas podrán activarse, y se comprarán medicamentos especializados.
Los mantendremos informados.
Bárbara Tello
AS Consultores